"La calidad de la muerte"

"La calidad de la muerte"
en Madrid ha descendido.
¿Y se sabe cómo ha sido?
No practicando la suerte
de sedar, dejando inerte,
a quien enfermo, ¿severo?,
lo llevaban al "Severo",
donde a Montes, un doctor,
del mundo benefactor,
tomaban por puntillero.


Psikofonías en El blog de Santiago González



Los jueces sentencian que no hubo 'mala praxis' en el hospital de Leganés

la Audiencia ratifica el archivo del caso por las presuntas sedaciones irregulares y defiende la labor de los médicos Bernat Soria exige a la presidenta de la comunidad de Madrid que pida «perdón público» a los profesionales
F. A. f.apezteguia@diario-elcorreo.com

SATISFECHOS. El médico Luis Montes y la socialista Matilde Fernández, tras conocer el fallo. / EFE
La Audiencia Provincial de Madrid ratificó ayer en un auto el sobreseimiento y archivo del caso de las presuntas sedaciones irregulares en el hospital Severo Ochoa y ordenó, además, que se suprima toda referencia a la posible mala práctica de los médicos denunciados. El especialista Luis Montes -a quien la Consejería de Sanidad de Madrid destituyó antes de que se investigara la primera denuncia presentada- y otros médicos imputados, así como la Asociación para la Defensa del Hospital Severo Ochoa, «estudian formular querellas personales por denuncia falsa contra los que, engañando a jueces y fiscales, denunciaron 400 asesinatos por eutanasia activa» en el centro.

La polémica suscitada en el Severo Ochoa arrancó en marzo de 2005 cuando la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, a partir de una denuncia anónima, acusó al coordinador del servicio de Urgencias, Luis Montes, de utilizar una «práctica de sedación en enfermos terminales, oncológicos y dementes» sin conocimiento de familiares y con el resultado de muerte. La misma denuncia llegó a la Consejería de Madrid, que optó por relevar automáticamente al especialista. La medida fue criticada por todos los colegios y asociaciones profesionales de España, que desde un primer momento expresaron su apoyo al facultativo y su deseo de que se aclararan los hechos.

No es la primera vez que los jueces dan la razón a los médicos y la enfermería del Severo Ochoa, pero la de ayer no fue una sentencia más. El fallo supone la confirmación de las reiteradas sentencias e informes que en los últimos meses han venido a concluir a favor de los profesionales sanitarios bajo sospecha. Unas veces por falta de pruebas, otras porque se consideró que lo hecho se había «ajustado a derecho».

Aguirre se alegra

Conocido el final del 'caso Leganés, el ministro de Sanidad, Bernat Soria, exigió a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, «y a los consejeros que les acusaron» que «pidan perdón públicamente» a los profesionales sanitarios, a quienes «se les acusó, ahora ya lo podemos decir, sin causa suficiente de una práctica irregular con resultado de muerte». El máximo responsable de la Sanidad española expresó, además su satisfacción por el hecho de que los denunciados vean reparados «su prestigio y calidad profesional», mediante un fallo que es firme y no admite recurso. El PSOE se expresó en términos similares a través de su portavoz en la Asamblea de Madrid, Maru Menéndez.

La presidenta de la comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, también dijo alegrarse del fallo judicial y aseguró que no tiene nada personal contra ninguno de los inculpados. La dirigente popular compareció en rueda de prensa tras asistir a una reunión de su partido. Sobre los cargos de confianza que fueron relevados, Aguirre sólo dijo que «se hará lo que corresponda y lo que se tenga que hacer».

Su consejero de Sanidad, Juan José Güemes, que sustituyó en verano a quien ocupaba el cargo cuando saltó el escándalo, Manuel Lamela, consideró «ridículo» que Bernat Soria exija disculpas al Gobierno regional porque «no es un fallo judicial contra la Administración sanitaria madrileña». Güemes dijo que la Sanidad de Madrid no formó parte del procedimiento judicial ni formuló acusación alguna contra el entonces jefe de Urgencias del Severo Ochoa.

Aún así, descartó que fuese a ser reintegrado en su puesto porque, afirmó, la gestión del servicio, desde su marcha, «ha mejorado notablemente». El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, pidió por su parte a Lamela que asuma la responsabilidad política de la «calumnia y la insidia» cometida contra el Severo Ochoa.